Bruselas.- El exministro del Interior español y presidente de la federación antiabortista One of Us, Jaime Mayor Oreja, asegura que el aborto «nunca puede ser un derecho» y afirma que la polémica por la posibilidad de que el Tribunal Supremo estadounidense revoque la protección legal de la interrupción del embarazo muestra que «el debate de la vida está abierto».
Mayor Oreja se pronuncia así en declaraciones a Efe con motivo de la celebración de la convención europea de la plataforma One of Us, que tiene lugar este sábado en Bruselas y en la que la federación pretende dar visibilidad a sus planteamientos sobre el aborto y la Unión Europea.
«Nunca el aborto puede ser un derecho, el aborto nunca puede ser elevado a la Carta de Derechos Fundamentales de Europa, como ha dicho (el presidente de Francia, Emmanuel) Macron. Eso es un suicidio», dice, en referencia a la propuesta del mandatario galo de que el derecho al aborto quede mejor protegido mediante su inclusión en la Carta de los Derechos Fundamentales del club comunitario.
La filtración del borrador de un fallo del Tribunal Supremo estadounidense que revocaría la tradicional protección legal del aborto en ese país y dejaría en manos de los estados la potestad de prohibirlo o permitirlo ha puesto el foco las últimas jornadas sobre el derecho a la interrupción del embarazo.
Mayor Oreja considera que el caso de Estados Unidos muestra que «el debate de la vida está abierto».
«Algunos creían que estaba enterrado, pero no habrá civilización sin cultura de la vida y ese debate nosotros lo queremos seguir manteniendo vivo en Europa», declara.
«Es evidente que, de la misma manera que la esclavitud fue moda dominante hasta que una serie de profesores, de intelectuales de la Escuela de Salamanca, (Francisco) de Vitoria, o lo que significa Bartolomé de las Casas, confirmó que esa moda dominante era un error, que era un disparate, nosotros seguimos empeñados en pensar que también hay que librarse de una moda dominante en el tema de la cultura de la administración de la muerte y que eso no es el progreso, eso es la decadencia», asevera.
Preguntado por si está a favor del aborto si el embarazo se ha producido tras una violación, pide no ir «a los puntos extremos, a las situaciones extremas».
«Defendamos el núcleo principal de los hechos. Yo siempre he sido contrario a la negociación con los terroristas, nunca he creído en la negociación con los terroristas. Ahora, no me pregunten la situación extrema en la que si un día secuestran a mi mujer, a mis hijos y a todos los miembros de mi familia, en ese momento, qué harías tú», dice.
Sobre el acto de este sábado en Bruselas, señala que el objetivo es «recordar que hay muchos millones de europeos» que quieren «una alternativa cultural sobre fundamentos cristianos» en el Viejo Continente.
