Santo Domingo.- La diáspora dominicana en Estados Unidos les ha abierto los ojos a los “cazatalentos” de la NBA, para que vengan y busquen en el país el talento que por “razones obvias”, NO ven los entrenadores dominicanos en el inicio de sus carreras, último ejemplo de esto, es el jugador de los Indiana Pacers, Chris Duarte, quien fue cortado del proyecto de selecciones nacionales y ahora es una estrella emergente en la NBA.
Como Chris, hay cientos de talentos que cambian el sueño del aro y el balón, por el de los estudios universitarios en Estados Unidos, “ya que las puertas se abren poco” en la tierra de Duarte, Sánchez y Mella para el que tenga un talento, “sin padrino”.
Hablemos de “Los Benzan”
Son los hijos del abogado dominicano John Benzan y Kim Benzan, su madre, miembro del Salón de la Fama de Brockton High y ex base armadora de la universidad de Holy Cross.
Patrick Benzan, buscó la oportunidad en campamentos de la selección dominicana y nunca la obtuvo. Point guard, de 5 pies, 11 pulgadas, nacido en Wellesley, Massachusetts, de la escuela Roxbury Latin (2015), jugó 4 temporadas para la universidad de Holy Cross (NCAA) del (2015 al 2019), promediando (5.2 puntos x juego), (2.3 Rebotes x juego) (1.9 asist. X juego).
Katie Benzan, Guard, de 5 pies 6 pulgadas, nacida en Wellesley, Massachusetts, de la universidad de Maryland (NCAA). Ayer, 6 de mayo del 2022, hizo historia convirtiéndose en la primera jugadora de ascendencia dominicana en llegar a un roster oficial de la exigente liga de baloncesto femenino de Estados Unidos, la WNBA.
Artículo de fecha, 2 de diciembre 2016
Los hermanos de Wellesley (ciudad de Massachusetts donde viven) disparan cada uno lo mejor de su carrera en una sola noche.
Las estrellas se alinearon para Patrick y Katie Benzan de Wellesley, la noche del 22 de noviembre del año 2016.
Katie, una base titular de primer año para el equipo de baloncesto femenino de la Universidad de Harvard, anotó 22 puntos al principio de su carrera, con 7 de 10 en sus intentos de tres puntos, cuando Crimson derrotó a la Universidad de Boston, 65-52.
Su hermano, Patrick, un estudiante de segundo año (permaneció 4 años) que sale de la banca durante minutos importantes mientras jugaba el punto para el equipo masculino de Holy Cross, anotó los mejores 16 puntos de su carrera en 7 de 10 tiros para llevar a los Crusaders a una victoria 63-52 en Harvard.
Su padre, el abogado John Benzan, asistió al juego de Patrick; su madre, miembro del Salón de la Fama de Brockton High y ex base armadora de Holy Cross, Kim Benzan, se sentó en las gradas de BU.
«Katie es una armadora natural, absolutamente pura, con un alto coeficiente intelectual de baloncesto y un gran conjunto de habilidades», dijo la entrenadora en jefe de Harvard, Kathy Delaney-Smith, quien no tuvo reservas acerca de poner a la actual Jugadora de Baloncesto Femenino del Año de Gatorade Massachusetts en el puesto. prueba.
“Cuando consigo uno bueno”, dijo, “voy con ella”.
El entrenador principal masculino de Holy Cross, Bill Carmody, no está menos entusiasmado con Patrick, una ex estrella de Roxbury Latin School que pasó un año de posgrado en Worcester Academy.
“Patrick nos da energía y coraje y tiene una habilidad especial para llegar a la canasta”, dijo Carmody, “y es un jugador de baloncesto de principio a fin”.
Harvard estaba 5-1 antes del juego en casa del jueves contra Temple y Katie, una anotadora de 2,000 puntos en Noble and Greenough School en Dedham, fue la segunda en anotar para Crimson con 12 puntos por juego. También estaba lanzando un 53 por ciento desde el territorio de tres puntos y un 93 por ciento desde la línea de tiros libres y fue nombrada co-novata de la semana de la Ivy League, el lunes.
Entrenada por su madre en los equipos de la ciudad, Metrowest y AAU y, durante la última temporada, cuando Kim era asistente de los Nobles, Katie llegó al equipo universitario de los Nobles en octavo grado.
Fue una parte integral de los cinco títulos consecutivos del Torneo NEPSAC Clase A del entrenador en jefe, Alex Gallagher.
Su decisión universitaria se redujo a Holy Cross y Harvard, “y sabía que cualquier elección que hiciera mi familia la apoyaría”, dijo. “Elegí el lugar que era mejor para mí y Patrick eligió el lugar que era mejor para él.
«Jugar en algunos juegos de presión y en una liga competitiva [la ISL] en Nobles realmente ayudó porque sé que puedo tener éxito y Kathy ha demostrado mucha fe en mí», agregó Katie, que mide un poco menos de 5 pies. 6 y utiliza un primer paso rápido para superar a los defensores más altos.
Patrick, el líder de puntos y asistencias de todos los tiempos de Roxbury Latin, promediaba 7.1 puntos por juego y lanzaba un 57 por ciento desde el campo y un 88 por ciento desde la línea. Tuvo 11 robos, el máximo del equipo, para los Crusaders 3-4 antes del partido del sábado en la Universidad de New Hampshire.
“Trabajé muy duro este verano en las bandejas y en mi tiro en suspensión, con mi mamá haciendo rebotes para mí”, dijo Patrick, que mide 5 pies y 11 pulgadas y ha sido seleccionado cuatro veces All-ISL y All-New England Clase B. en Roxbury Latin. “Salir de la banca me da la oportunidad de ver el flujo del juego y, con suerte, darle un impulso a nuestro equipo”.
Katie dijo que su mamá a menudo le dice que “el trabajo duro vence al talento cuando el talento no trabaja duro”, y ella ve mucho de sí misma en Patrick.
“Somos similares por nuestra dureza y nuestra competitividad, y somos implacables”, dijo. “Al crecer, yo era el mejor tirador y él era el mejor regateador. Nuestro espíritu competitivo, ir uno a uno en el camino de entrada o en el gimnasio para ayudarnos unos a otros, ha despertado algo en nosotros hoy”.
Uno de sus ejercicios de práctica es lanzar 15 triples desde siete puntos más allá del arco. El perdedor tiene que hacer 10 abdominales.
Patrick, que usa el número anterior de su madre (10) y tenía un GPA de 3.5 en su primer año, admite, entre risas, que ha hecho más abdominales que su hermana.
Sus padres se conocieron cuando Kim era estudiante de primer año en Holy Cross y John, que jugaba baloncesto en Malden Catholic, era el director del equipo de baloncesto masculino de Crusader. John entrenó a Patrick desde quinto hasta octavo grado y como asistente en Roxbury Latin.
Kim, quien comenzó el programa AAU New England Crusaders del área de Boston, fue entrenadora principal de niñas en Dover-Sherborn y Needham High.
“Hablando como entrenadora y no como su madre, Katie es una armadora especial que no rehuye los momentos difíciles”, dijo Kim. “Y hablando solo como madre, estoy encantada de que Katie tenga una mentora como Kathy”.
Patrick, dijo, es un jugador similar, “duro como un clavo. Nunca aceptó perder, ni siquiera en juegos de cartas y dominó cuando era niño. El año pasado, tuvo un papel mucho menor como estudiante de primer año después de una cirugía de tobillo, pero ha trabajado duro para tener tiempo de juego”.
Dos días después de sus destacadas actuaciones, los hermanos invitaron a un grupo de compañeros de equipo de Harvard y Holy Cross a su casa de Wellesley para el Día de Acción de Gracias.
“Definitivamente fue una casa llena”, dijo Kim, quien junto con su esposo preparó dos pavos de 15 libras. “Algunos vieron fútbol, otros vieron una película y todos se ofrecieron como voluntarios para limpiar. Estamos bendecidos’’.
