La NBA y la Asociación Nacional de Jugadores de Baloncesto (NBPA) llegaron a un acuerdo sobre un nuevo acuerdo de negociación colectiva de siete años, que promete paz laboral durante el resto de la década, dijeron fuentes el sábado por la mañana.
El acuerdo tentativo, que comienza con la temporada 2023-24, fue anunciado por la liga y el sindicato y se espera que sea ratificado por los gobernadores y jugadores de la liga en las próximas semanas. El acuerdo incluye una opción de exclusión mutua después del sexto año.
El acuerdo llegó temprano el sábado por la mañana después de que ambas partes acordaron extender la fecha límite de la medianoche ET para que la liga optara por no participar en el último año del contrato colectivo de trabajo anterior.
El comisionado de la NBA, Adam Silver, la directora ejecutiva de la NBPA, Tamika Tremaglio, y los negociadores de ambos lados, incluidos Dan Rube de la NBA y Ron Klempner del sindicato, elaboraron los detalles restantes del acuerdo, dijeron las fuentes.
Después de dos extensiones de la fecha límite de exclusión anticipada, las negociaciones de la liga con Tremaglio y el nuevo presidente de la NBPA, CJ McCollum, llegaron a un acuerdo meses antes de un posible paro laboral.
Entre los elementos iniciales clave del acuerdo descritos:
La NBA está frenando la capacidad de los equipos que más gastan, como los Golden State Warriors y los Clippers, para seguir aumentando los salarios y el gasto en impuestos de lujo mientras mantiene los mecanismos para agregar talento a la lista. La NBA está implementando un segundo tope salarial – US$17.5 millones por encima de la línea de impuestos – y esos equipos ya no tendrán acceso al nivel medio de los contribuyentes en la agencia libre. Esos cambios se suavizarán en el tope salarial durante un período de años.
Bajo estos cambios, Donte DiVincenzo de Golden State, Joe Ingles de Milwaukee, Danilo Gallinari de Boston y el ex guard de los Clippers John Wall no habrían podido firmar con esos equipos el verano pasado.
Como contrapartida a esas limitaciones de gasto, se espera que el nuevo CBA cree más oportunidades de gasto y comercio para los equipos en el espectro medio y bajo de gasto. Habrá una apertura de más oportunidades en el mercado de agentes libres, incluidas excepciones comerciales más grandes.
En un intento por frenar la gestión de la carga y los juegos perdidos entre los jugadores estrella, la NBA está vinculando la elegibilidad para los premios de postemporada, como los equipos All-NBA y MVP, a 65 juegos obligatorios jugados. El mínimo de 65 juegos viene con algunas condiciones.
El torneo de temporada podría llegar tan pronto como la temporada 2023-24. El evento incluirá juegos de grupo integrados en el calendario de la temporada regular a partir de noviembre, con ocho equipos avanzando a un torneo de eliminación simple en diciembre. La Final se llevará a cabo en un sitio neutral, con Las Vegas en un lugar destacado en la discusión, dijeron las fuentes.
Cada juego de torneo de la temporada contaría para la clasificación de la temporada regular; los dos finalistas finalmente jugarían un partido 83 que no contaría en la temporada regular. Los jugadores y entrenadores ganadores obtendrán premios en metálico adicionales.
La NBA y la NBPA acordaron aumentar los límites superiores de las extensiones de un aumento del 120 % en un acuerdo actual al 140 %, lo que podría tener un impacto significativo en el futuro de estrellas como el alero de los Celtics, Jaylen Brown.
Según las reglas actuales, a Brown se le permitiría firmar una extensión de cuatro años por valor de US$165 millones. Sin embargo, con las reglas de extensión aumentadas al 140%, Brown, quien ganará US$31.8 millones en la temporada 2023-24, el último año de su contrato actual, podría alcanzar su máximo de cuatro años de US$189 millones.
Del mismo modo, el centro All-Star de los Sacramento Kings, Domantas Sabonis, actualmente podría firmar una extensión de cuatro años y US$111 millones, una que salta a US$121 millones con el aumento al 140%.
Hay un aumento en los espacios de contratos bidireccionales, saltando de dos a tres por equipo. Los contratos bidireccionales se crearon en el convenio colectivo de trabajo de 2017 como un vehículo para que los equipos desarrollen jugadores más jóvenes. Se ha visto como un éxito, ya que se ha convertido en una ruta para que los jugadores ganen casas a largo plazo en la liga y, en varios casos, se conviertan en importantes contribuyentes.
Algunas de las mayores historias de éxito que surgieron de la negociacion bidireccional incluyen: Austin Reaves y Alex Caruso con Los Angeles Lakers; Duncan Robinson y Max Strus con Miami Heat; Anthony Lamb con los Warriors; José Alvarado con los New Orleans Pelicans; y Luguentz Dort con Oklahoma City Thunder.
